Un cráneo enigmático abre nuevos interrogantes sobre la evolución humana.

La estructura interna del fósil hallado en China revela una mezcla de rasgos que no permiten ubicarlo en las especies conocidas.
El estudio de la evolución de los seres humanos no es algo simple de explicar. Aunque se conocen varios eslabones, es complejo identificar y ubicar a cada ancestro en una sola categoría. Maba 1 es un fósil crucial del Pleistoceno Medio tardío asiático, hace unos 300 mil años. Aunque pertenece a la época donde surgieron los Neandertales, su cráneo cuenta otra historia. En este contexto, científicos de China y Francia estudiaron la estructura interna del fósil encontrado, más allá de la información que brindaba el análisis de su superficie. Como resultados de esto, Maba 1 no puede encasillarse en ninguna de las especies de homínidos conocidas hasta el momento. Los resultados de estos estudios forman parte de un artículo publicado en la revista American Journal of Biological Anthropology al que la Agencia de Noticias Científicas de la Universidad Nacional de Quilmes tuvo acceso.
Maba 1 es un fósil humano encontrado en la cueva de Lion Rock en la provincia de Guangdong, al sur de China. Aunque se halló en 1958, la clasificación es ambigua ya que tiene una mezcla de rasgos antiguos y modernos. Se ha propuesto que pertenecía a los Homo heidelbergensis quienes también habitaban la zona hace 200 mil años atrás, pero tiene rasgos que lo ubican en los Neandertales. Para llegar a estas conclusiones, los científicos utilizaron técnicas de avanzada como la microtomografía computada para poder estudiar la estructura interna del cráneo y dar más precisiones respecto a cómo hubiese sido su aspecto hace 200 mil años.
Los senos frontales de Maba 1, las cavidades que se ubican encima de las cejas y detrás de la frente, revelan que habría pertenecido a los Neandertales. Sin embargo, el interior de la cavidad craneal se asemeja al Homo erectus. Maba 1 también tiene puntos en común con otros especímenes controversiales, como Djebel Irhoud y Broken Hill 1, encontrados en Marruecos y Zambia respectivamente. Según los especialistas, los hallazgos hablan de una enorme variabilidad entre los homínidos asiáticos que habitaron a fines del Pleistoceno Medio.
Quienes escribieron el artículo de American Journal of Biological Anthropology afirman que no es raro encontrar homínidos del Pleistoceno medio que no pueden ubicarse en una categoría establecida. Por el momento, Maba 1 pertenece a los “no erectus”, al menos hasta que la ciencia demuestre lo contrario.

Nadia Chiaramoni
Agencia de Noticias Cientificas UNQ.